Las evidencias científicas
El cuerpo ve a las carnes rojas como invasores externos que deben de ser eliminados y esto ha salido publicado en un nuevo estudio en la revista científica “Proceedings of the National Academy of Sciences”.
Desde hace décadas las carnes rojas se han asociado con el riesgo de cáncer y después de muchas investigaciones realizadas se demuestra que consumir gran cantidad de carne de vacuno, cordero o de cerdo aumenta considerablemente el riesgo de desarrollar tumores malignos.
¿Por qué la carne roja produce cancer?
Los científicos siempre se han preguntado como los demás mamíferos se alimenta principalmente de carne roja sin tener efectos secundarios para la salud.
En este estudio se descubrió que la carne tanto de cerdo, como de vaca y también la de cordero contienen azúcar que se produce de manera natural por los otros seres carnívoros pero no por el ser humano.
Esto quiere decir que cuando un humano come carne roja se produce una respuesta del sistema inmune en el organismo hacia este azúcar externo, de manera que se producen anticuerpos que producen inflamación y en ocasiones cáncer.
Sucede que en los otros carnívoros, o mejor dicho en los animales carnívoros ya que nosotros no estamos hechos para comer carne, el sistema inmune no responde contra este azúcar, puesto que este azúcar ya se encuentra en su cuerpo. Al azúcar que se encuentra ya en los animales carnívoros se le llama Neu5Gc.
Los científicos que realizaron este estudio descubrieron que los ratones a los que se les había modificado genéticamente para que no contengan este azúcar, desarrollaron cáncer nada más ingerirla.
En esta investigación también se pudo explicar cómo hay muchas conexiones entre el consumo de carne roja y el desarrollo de muchas enfermedades que se ven agravadas por la inflamación crónica, como pueden ser la diabetes de tipo 2 y la arterioesclerosis.
Los expertos en salud no recomiendan superar la cantidad de 70 gramos por día de carne, que viene a ser equivalente a una chuleta de cordero o 3 lonchas de jamón, aunque la realidad es que lo mejor es no consumir carne ya que entre otras cosas y además de contener hormonas y medicamentos, produce acidez en la sangre.
En Junio del 2014 se publicó un estudio en la Universidad e Harvard en el que se indicó que una dieta alta en carne roja aumenta el riesgo de padecer cáncer de mama en un 22%.
En otro estudio en el año 2005 demostró que las personas que consumen diariamente 160 gramos de carne roja tenían 1/3 más de probabilidades de desarrollar un cáncer de intestino